Dos adversarios y un enemigo en común: el reloj.

De rigurosa chaqueta blanca profesional, Mica Viciconte y Tomás Fonzi entraron al estudio para medirse en la final de la competencia de Masterchef Celebrity 3, el domingo por la noche.

El programa de Telefé tuvo varios momentos previos al encendido de las hornallas. Con la dinámica de edición que lo caracteriza, hubo impresiones de los dos finalistas y el jurado integrado por Donato De Santis, Damián Betular y Germán Martitegui no ahorró calificativos elogiosos para con Mica y Tomás.

Recordaron que Fonzi pensaba que llegaría, como máximo, a fines de diciembre, y la circunstancia que podía cambiar todos los planes de Mica, cuando anunció su embarazo.

“En los momentos más complicados, la ofuscación no los dominó”, señalaron con respecto a la actitud personal de los participantes. “Dos buenos pilotos”, se dijo después en el programa que conduce Santiago Del Moro.

La noche del domingo incluyó la visita de los excompañeros de competencia. Ocho participantes estuvieron en las islas de cocina, alentando, opinando y, en algunos casos, estorbando. Es parte del reality que adobó la performance final con la participación de quienes fueron quedando en el camino.

También entraron en las cocinas los familiares de Viciconte y Fonzi.

“Es la primera vez que abro esta ventana”, dijo el actor. Su pareja e hija lo escoltaron con prudencia, mientras mamá María, ya conocida por la audiencia, seguía de cerca los detalles de una crema que no debía cortarse.

También sorprendió la presencia de Cubero con sus hijas. Las chicas ayudaron a Mica a cronometrar las preparaciones simultáneas.

El menú de tres pasos (entrada, plato principal y postre) fue elegido por cada finalista para ser realizado en 90 minutos.

Luego de los tres minutos en el mercado, se largó la carrera por el premio mayor.

“Arrancaron en quinta”, dijeron los espectadores cercanos.

Fue notable la concentración y el estrés de Mica Viciconte. La cocinera contó que realizó tres veces en su casa el procedimiento completo de los platos de su menú.

Una de las dificultades clave del certamen es la administración del tiempo. Los pasos simultáneos en la realización pusieron la adrenalina propia de una final.

El domingo se enfrentaron el instinto (Fonzi) y la perfección (Viciconte).

Durante meses la audiencia de Masterchef Celebrity 3 conoció el carácter de los participantes, sus fortalezas y debilidades. Fonzi mantuvo el tono de juego, aun en los momentos de mayor incertidumbre, mientras Viciconte creció con perfil propio.

Micaela entró como influencer, más conocida por la exposición mediática que alcanzó cuando se puso en pareja con Fabián Cubero, y llega a la final como cocinera aguerrida y jugadora hábil en estrategias. Sorprendió cómo puso su pasión por las competencias al servicio de un programa en el que hay que dosificar los fuegos.

El menú de Viciconte consistió en una entrada de vieras gratinadas con salsa monray; como plato principal, mollejas y langostinos grillados con un puré de coliflor y echalote con una reducción de salsa de hongos y ajo negro; y como postre, un cremoso de chocolate, 70% cacao, con una teja coral y una salsa de frutos rojos. En tanto, Fonzi eligió como entrada una brusqueta de morcilla, pera y queso brie, un bife de chorizo wagyu con hinojos y tomates confitados, y un durazno asado sobre sabayón rosado con una crema batida y unos pistachos caramelizados.

La emisión del domingo alcanzó un pico de 17,1 puntos de rating a las 23.04. Habría que medir cuánta gente se cansó y abandonó, a causa de las tandas interminables de publicidad.

Esta noche se sabrá quién sube al podio que ya ocupan Claudia Villafañe y Gastón Dalmau.