Un hombre de 42 años fue víctima durante el fin de semana de un grave hecho de inseguridad. Si bien en el trayecto por el que habría sido obligado la víctima a conducir por sus secuestradores hay algunas cámaras de seguridad, hasta el momento, la Justicia no logra dar con el paradero de los delincuentes quienes, luego de abandonar a la víctima en inmediaciones al puente en la avenida de Circunvalación -continuación de avenida Güemes al este- se llevaron el teléfono celular, la moto y la billetera del damnificado.

Se pudo conocer de fuentes policiales y judiciales que, alrededor de las cuatro de la madrugada, un llamado alertó al 911 que, a la altura del puente en la avenida antes mencionada, había una persona golpeada.
Al arribar la patrulla, encontró a Héctor Silvera, quien presentaba golpes a simple vista en distintas partes del cuerpo, pero no requería la presencia del personal del SAME.

El hombre, siempre según la información oficial, les habría dicho a los efectivos que, momentos antes, se trasladaba solo a bordo de una motocicleta, aparentemente con destino a su domicilio, cuando, al circular por calle Mate de Luna, metros antes de llegar a calle Vicario Segura, una moto en la que se trasladaban dos sujetos, literalmente, se le atravesó, obstaculizándole el poder circular por lo que bajó la velocidad.

En ese momento, fue abordado por uno de los delincuentes, el que, empuñando un cuchillo, se sentó como acompañante y lo obligó a conducir hasta la Circunvalación.

Una vez en el lugar, a la altura del puente, en un sector de poca iluminación artificial, el delincuente lo agredió, arrojándolo de la moto para, luego, robarle el teléfono celular y la billetera.

Seguidamente, el malviviente volvió a abordar la moto de Silvera, aceleró y, junto a su cómplice, quien se trasladaba en la otra moto, huyeron ambos con rumbo desconocido.

Luego de escuchar el relato de la víctima y alertar a través del SAE a todas las patrullas sobre el ilícito ocurrido para la ubicación de los autores y de la motocicleta, la policía trasladó al damnificado a la Unidad Judicial N° 1, donde denunció el ilícito.

Del mismo tomó intervención el Dr. Horacio Brizuela, quien impartió las directivas a seguir.