El Real Madrid demostró su estirpe copera y se clasificó a las semifinales de la Champions League pese a haber perdido por 3-2 ante el Chelsea, de local. El resultado del partido de ida, en donde el Merengue se impuso por 3-1, le permitió a los dirigidos por Carlo Ancelotti pasar a la siguiente fase.

Karim Benzema resultó de nuevo el jugador clave ya que con su gol de cabeza tras un centro de Vinicius en la prórroga firmó la clasificación del Madrid, después de estar prácticamente eliminado por el Chelsea que defendía el título.

Pese a que la eliminatoria parecía sentenciada tras el triunfo blanco por 3-1 en Londres hace una semana, el Chelsea fue capaz de darlo la vuelta con los goles de Mason Mount (15) y de los alemanes Antonio Rügiger (51) y Timo Werner (75), pero cuando el Real Madrid parecía tener todo perdido, forzó primero la prórroga y selló después su clasificación en el tiempo extra.

El equipo español, que busca su 14º título continental, se jugará el pase a la final frente al vencedor de la semifinal que resolverán el miércoles Atlético de Madrid y Manchester City (con ventaja de 1-0 para los ingleses).

Un partido flojo del Real Madrid, que fue superado por el Chelsea

Todo parecía sentenciado tras el duelo de la ida en Stamford Bridge, pero el Real Madrid comenzó el partido demasiado pendiente de gestionar la ventaja lograda en Londres y cuando se quiso dar cuenta, los aún campeones de Europa ya habían marcado el primero por medio de Mount, aprovechando una buena triangulaciónde la delantera londinense.

Los temores de los fanáticos blancos se confirmaron al inicio del segundo periodo cuando Rüdiguer empató la eliminatoria con un potente cabezazo (51) y se convirtieron en una pesadilla cuando Werner hizo el tercero en una magnífica jugada individual (75).

Cuando peor lo tenía el Real Madrid, Rodrygo metió de nuevo al equipo blanco en la eliminatoria forzando la prórroga (80), en la que Benzema acabaría dando la clasificación a los blancos con un remate de cabeza tras un centro de Vinicius (96).