Entre la tarde del martes y la mañana de ayer, tres denuncias por el supuesto delito de abuso sexual fueron realizadas en las Unidades Judiciales N° 2 y N° 6 y en la comisaría departamental de Belén. Hasta el momento, solo uno de los sindicados fue detenido por la policía.

Voceros judiciales informaron que la fiscalía en turno, a cargo del Dr. Federico Maturano, tiene a su cargo la investigación de dos de las tres denuncias en donde los sindicados son el padre y el esposo de las víctimas respetivamente.

El martes a la tarde, una joven de 22 años se presentó en la Unidad Judicial N° 2 y denunció a su padre. Dijo que, en el año 2014, cuando tenía 15 años, su progenitor había abusado sexualmente de ella en el domicilio donde convivían junto al resto de la familia, en la zona sur de la Capital, pero que no se había animado a denunciarlo por miedo y vergüenza.

La otra víctima es una mujer de 32 años, quien en la madrugada de ayer denunció a su esposo por el delito de abuso sexual con acceso carnal. La mujer le contó al personal de la Unidad Judicial Nº 6 que mientras dormía, el sujeto ingresó a su casa, la tomó por la fuerza y, con violencia y bajo amenazas, la sometió sexualmente contra su voluntad.

Mientras la víctima recibía asistencia médica del SAME, el hecho fue informado vía telefónica al fiscal Maturano, quien dispuso el inmediato arresto del sindicado y que personal de la unidad judicial trabajara en el lugar del hecho.

Tras las denuncias, desde la Justicia se activaron de inmediato los protocolos de abuso sexual en ambas denunciantes.

En Belén

La tercera denuncia por supuesto abuso sexual la realizó la abuela de una niña de 11 años -de quien, por razones obvias, se resguardan los datos personales- en la comisaría departamental de Belén la noche del martes.

Según se pudo saber, ya que se trata de un delito de instancia privada, el denunciado sería un primo de la niña de 16 años, quien abusó de la pequeña en dos oportunidades en la casa de su padre, cuando la pequeña junto a su madre y una hermana se quedaban a dormir en su vivienda.

La mujer denunció que, en horas de la siesta, encontrándose en su casa, vio a su nieta, quien estaba en el fondo, con los ojos llorosos y, al preguntarle qué le pasaba, le contó que, días atrás, cuando fue con su madre a la casa de su primo, este se acostó junto a ella en la cama donde estaba viendo televisión y comenzó a tocarse sus partes íntimas hasta que ingresó su padre y se tapó con una sábana.

También le dijo que el lunes se acostó como a las 9 de la noche en un colchón en el que también se acostó su primo y, aprovechando que su madre y su hermana dormían en otro colchón, se puso a ver videos pornográficos en su teléfono celular y la tocó en sus partes íntimas. Lo que sucedió por varios minutos hasta que su mamá se levantó para ir a la cocina.