Facundo Campazzo es como un vino precoz: no juega mejor con el correr de los años sino con el paso de los días. En otra gran actuación personal, el cordobés hizo un valioso aporte para que Denver Nuggets venciera con facilidad a uno de los buenos equipos de la conferencia Este de la NBA, New York Knicks (la nueva casa de Luca Vildoza) por 113 a 97.

El base de la Selección argentina de básquet aportó nada menos que 16 puntos, 9 rebotes, 5 robos, 4 asistencias y hasta 2 tapas en 33 minutos de juego.

Tanto las capturas en el tablero como los recuperos de pelota fueron sus mejores marcas personales en dichos rubros desde que juega en la mejor liga del mundo.

Ya desde el inicio Campazzo -una vez más titular, a esta altura una realidad que difícilmente se vaya a modificar en lo que resta de temporada- hizo de las suyas, mostrándose como un prolífico asistidor: dio nada menos que cinco pases gol en los primeros compases del partido.

Ese período inicial terminaría con Denver arriba 34-12, diferencia significativa que, a diferencia de otras ocasiones en las que dilapidó ventajas valiosas, esta vez no se vería modificada. Nikola Jokic, cada vez más candidato a MVP de la temporada, hizo en ese rato nada menos que 24 puntos. En contrapartida Julius Randle, la figura de los Knicks, tan sólo anotó un punto en ese rato.

Campazzo llegó al descanso completando una gran primera mitad, en la que continuó certificando la agresividad al aro que empezó a mostrar a partir de la ausencia del lesionado Jamal Murray, pero también esa agresividad a la hora de proteger la canasta propia.

El Bandido, como le llaman en la transmisión de la cadena televisiva local que sigue a los Nuggets, hizo gala de la velocidad de sus manos para robar balones.

La ventaja fue tal que el coach Michael Malone incluso pudo darle descanso a sus mejores jugadores durante el último tramo de partido, Campazzo entre ellos.

Con frenos, amagues y fintas, el cordobés fue siempre una preocupación para los defensas rivales y defendió en gran forma, como suele hacerlo, a un ex MVP de la NBA como Derrick Rose, quien si bien nunca volvió a ser el mismo tras sus múltiples lesiones, sigue teniendo destellos del crack que fue y hoy juega además con la experiencia de sus años en la liga.

El próximo partido de los Nuggets será este viernes, desde las 22 de Argentina, ante nada menos que el líder de la conferencia Oeste, Utah Jazz. Denver se trepó a la tercera colocación, cada vez con más margen respecto a quienes marchan quinto (Dallas Mavericks), sexto (Los Angeles Lakers) y séptimo (Portland Trail Blazers) y a tres victorias del segundo lugar (que ocupa Phoenix Suns).